Cualquier comentario, cualquier dato o cualquier comparación que se haga respecto a Rossi y la pista de la Toscana, propiedad de Ferrari, se queda pequeño. Por ejemplo: desde que la categoría reina se disputa con motos de cuatro tiempos y se denomina MotoGP, desde 2002, solo Valentino se ha impuesto en Mugello. Con esto podría bastar para definir su condición de favorito, pero hay más: a las seis de MotoGP hay que sumar una en 125 c.c., en 1996, su primer año en el Mundial, y otra en 250 c.c., en 1999.
Frente a él estarán dos españoles, Jorge Lorenzo (Yamaha) y Dani Pedrosa (Honda), segundo y tercero del campeonato, respectivamente, a tres puntos de Rossi, dispuestos a disputar el liderato en el feudo de su máximo rival. Pedrosa nunca ha ganado en MotoGP en Mugello y la rapidez de la pista no parece beneficiarle en esta ocasión. Pero Dani está realizando un extraordinario comienzo de temporada y de él se puede esperar cualquier cosa.
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